CLICK HERE FOR BLOGGER TEMPLATES AND MYSPACE LAYOUTS »

miércoles, 2 de abril de 2008

Juan Salvador Gaviota, fragmentos

La única respuesta que puedo dar, Juan, es que tú eres una gaviota en un millón. La mayoría de nosotros progresamos con mucha lentitud. Pasamos de un mundo a otro casi exactamente igual, olvidando enseguida de dónde habíamos venido, sin preocuparnos hacia dónde íbamos, viviendo sólo el momento presente. ¿Tienes idea de cuántas vidas debimos cruzar antes de que lográramos la primera idea de que hay más en la vida que comer, luchar, o alcanzar poder en la Bandada? ¡Mil vidas, Juan, diez mil! Y luego cien vidas más hasta que empezamos a aprender que hay algo llamado perfección, y otras cien para comprender que la meta de la vida es encontrar esa perfección y reflejarla. La misma norma se aplica ahora a nosotros, por supuesto: elegimos nuestro mundo venidero mediante lo que hemos aprendido en éste. No aprendas nada, y el próximo mundo será igual que éste, con las mismas limitaciones y pesos de plomo que superar.
****
¡Si nuestra amistad depende de cosas como el espacio y el tiempo, entonces, cuando por fin superemos el espacio y el tiempo, habremos destruido nuestra propia hermandad! Pero supera el espacio, y nos quedará sólo un Aquí. Supera el tiempo, y nos quedará sólo un Ahora. Y entre el Aquí y el Ahora, ¿no crees que podremos volver a vernos?
Juan Salvador Gaviota, de Richard Bach.

5 imaginan conmigo:

Carlota dijo...

uf! ese libro es una pequeña joya. Precisamente, cito un fragmento en mi último post :). Y esto que has elegido es magnífico, además de venirme como anillo al dedo: superar tiempo y espacio... sí... y una amistad que así lo haga será eterna. Encontrar la perfección (aunque no me gusta esa palabra, yo hubiera puesto otra) y reflejarla, sí... somos espejos y nuestros reflejos iluminarán a los que nos rodean y ellos a su vez... Un beso, grande.

Anónimo dijo...

Este libro acaba de ser apuntado en mi lista de libros por leer ^.^

¡¡Me ha encantado este fragmento!! Y como le pasa a Carlota, ahora mismo yo también me siento muy identificada con él :)

Un besazo!

alfonso dijo...

La primera vez, lo leí publicado en el Selecciones del Reader's Digest. John Livingstone Seagul. Muchos años más tarse, lo compré. Siempre fue "especial" para mí.

BELMAR dijo...

tremenda obra!!!!

Abuela Ciber dijo...

He dejado dos regalos para ti en mi blog.
Cariños